Descubre cómo volver a avanzar con claridad y propósito
A veces no hace falta que pase algo grande para que sientas que algo no está bien.
Simplemente un día te das cuenta de que vas en piloto automático, que ya no te ilusiona lo que haces, o que llevas demasiado tiempo pensando:
“Esto no puede ser todo”.
Si te sientes estancada profesionalmente, no estás sola.
Muchas mujeres atraviesan esta sensación en algún momento de su vida laboral. Lo importante no es ignorarlo, sino escucharlo como una señal de que algo dentro de ti pide atención, dirección y cambio.
En este artículo, te comparto algunas claves para entender qué te está ocurriendo y qué pasos puedes dar para volver a avanzar con confianza.
1. Escucha la incomodidad (sin juzgarte)
El primer paso no es hacer nada. Es parar y escucharte.
➤ ¿Qué te está diciendo este estancamiento?
¿Te aburre tu trabajo? ¿Sientes que no estás creciendo? ¿Te has adaptado tanto que has perdido tu esencia?
Nombrarlo es empezar a soltarlo.
➤ No lo minimices
No es “una tontería” ni “algo que se me pasará”. Si lo sientes, es real. Y vale la pena atenderlo.
2. Reconecta con quién eres hoy
No somos las mismas a los 25 que a los 35 o los 45.
Quizá el trabajo que elegiste hace años ya no encaja con la mujer en la que te has convertido.
➤ Haz una pausa de autoconocimiento
¿Cuáles son tus valores ahora? ¿Qué te interesa? ¿Qué te agota? ¿Qué te hace sentir viva?
➤ Acepta que cambiar de rumbo es evolución, no fracaso
Replantearte tu camino no significa que te equivocaste. Significa que estás creciendo.
3. Identifica qué te bloquea (de verdad)
Muchas veces el problema no es no saber lo que quieres, sino tener miedo a dar el paso.
➤ Miedo al cambio
A perder estabilidad, a decepcionar a otros, a fracasar… Todos esos miedos son normales.
La clave está en no dejar que te paralicen.
➤ Falta de claridad
No saber por dónde empezar es muy común. Pero no necesitas tenerlo todo resuelto. Solo necesitas dar el siguiente paso.
4. Imagina nuevas posibilidades
Cuando te sientes estancada, es fácil pensar que “ya es tarde” o que “esto es lo que hay”. Pero eso no es verdad.
➤ Haz una lista de lo que te gustaría explorar
Puede ser un cambio total o simplemente un ajuste. Quizás un nuevo rol, un curso, emprender algo propio…
➤ Mira alrededor
Conecta con mujeres que ya han hecho cambios. Ver que es posible te inspira y te recuerda que tú también puedes.
5. Empieza en pequeño, pero empieza
La claridad no viene solo pensando. Viene actuando.
➤ Elige una acción concreta
Actualizar tu CV, hacer networking, formarte en algo nuevo. Todo cuenta.
➤ Hazlo con intención, no con presión
No se trata de ir rápido. Se trata de volver a sentir que avanzas.
6. Rodéate de personas que te impulsen
Cuando te sientes estancada, a veces lo más valioso es alguien que te recuerde que no tienes que hacerlo sola.
➤ Comparte lo que sientes
Habla con amigas, colegas, personas de confianza. Te sorprenderá saber cuántas han pasado por lo mismo.
➤ Busca acompañamiento profesional
Un coach puede ayudarte a clarificar tus ideas, derribar bloqueos y construir un plan que se adapte a ti.
Conclusión: estar estancada no es el final. Puede ser el principio.
Sentirte bloqueada o perdida no significa que estés rota.
Significa que algo en ti está pidiendo un cambio.
Y eso es poderoso. Porque es el inicio de un camino nuevo, más auténtico, más tuyo.
Si necesitas un impulso, una guía o simplemente una mano amiga para dar el primer paso… estoy aquí para acompañarte.